“De acuerdo con el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) cien toneladas de hielo se funden cada centésima de segundo! siendo esta la principal relación existente entre la obra de arte “Ice watch” y el antropoceno. El objetivo de Olafur y Minik en su obra es exhibir a la humanidad como el principal culpable de el deterioro que la tierra está viviendo. Por lo anterior, esta escultura es la colección de 12 toneladas de hielo ubicados en la plaza de Groenlandia donde los espectadores pueden ver que la razón de su diario derretimiento es el cambio climático. El cual se ignora mientras no se dimensiona la magnitud del deterioro que esta causando en el planeta.
Ahora bien, “Ice watch” no reúne todo el concepto del antropoceno ya que se fija solo en una de sus principales consecuencias, el cambio climático. Sin embargo, el factor diferenciador de Olafur y Minik es que decidieron que esta obra debía trascender más allá de lo visual y es por eso que muestran el arte como una experiencia que pueda dejar un aprendizaje de gran impacto para la conciencia de sus espectadores. El secreto de la creación de esta experiencia artística se realiza en base a la teoría que recolecta todos los datos, estudios y publicaciones que las personas cotidianamente ignoran respecto al cambio climático y sus efectos, para poder llevarla a la tangibilidad. En otras palabras, refleja la posibilidad de mostrar físicamente, por ejemplo, un pedazo del ultimo reporte que la ONU publicó sobre el derretimiento de los bloques de hielo y como estos generaban un gran aumento en el nivel del mar. Tiempo después de que los creadores trasladaron los bloques de hielo al lugar de exposición se generó la reacción que se esperaba, pasar a la práctica mientras se generaba conciencia. Las reacciones de los visitantes, sin duda, van más allá de la observación, pues ellos interactúan con la escultura mientras la abrazan prueban, palpan y juegan, para crear un vinculo con la misma que permite que se identifiquen y se apropien de ella. Lo anterior, para que logren dimensionar lo que los estudios revelan, ya que como dijo Olafur, los hechos no son suficientes para motivar a la gente, muchas veces hay que generar un reacción contraria, pues para promover el cambio hay que llegar al corazón.
Por todo lo anterior, considero que Olafur Eliasson y Minik Rosing pueden revolucionar el pensamiento a partir del arte. Pues estos dos grandes artistas crean una estrategia que involucra la experiencia sensorial a un nuevo nivel para generar vínculos individuales con sus espectadores y así mismo, conciencia en cuanto al daño que estos hacen frente al cambio climático. Ya que de seguro, cuando los espectadores vuelven a sus hogares, se llevan una nueva actitud de cambio para implementar en sus actividades cotidianas, ducharse en menos tiempo, reciclar, usar medios de transporte amigables con el medio ambiente, etc. Finalmente, el querer no poner a actuar la persona con la razón y que sean los sentimientos que se apropien de ellos, para mi, es la creación de una corriente de pensamiento permite traer la esperanza de poder terminar con un factor que ha desarrollado esta etapa de antropoceno, sin duda una posible verdadera solución a toda las crisis que están sucediendo.
Referencias
Eliasson, O., & Rosing, M. (2016). 15 obras para pensar el Antropoceno. Retrieved 2 September 2020, from https://revistacodigo.com/arte/15-obras-para-pensar-el-antropoceno/
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